La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA) confirmó que la Anomalía Magnética del Atlántico Sur (AMAS) continúa desplazándose hacia el oeste y ya abarca gran parte del centro y norte argentino, generando preocupación en la comunidad científica por sus posibles efectos sobre los sistemas tecnológicos, satelitales y de telecomunicación.
La Plata, 07 Ago (Por InfoGEI).-Esta región, donde el campo magnético terrestre es notablemente más débil, permite la entrada de partículas solares en niveles más altos de lo normal, lo que puede producir fallos en sistemas de navegación, GPS y satélites, entre otros efectos.
Según visualizaciones actualizadas por la NASA, la AMAS se ha desplazado aproximadamente 20 kilómetros por año, y entre 2015 y 2025, su intensidad magnética disminuyó al menos un 7% en Sudamérica, concentrándose especialmente sobre Argentina.
“El campo magnético terrestre actúa como un escudo contra el viento solar. Su debilitamiento compromete el funcionamiento de satélites y aumenta la exposición a la radiación”, explicaron desde el Centro Goddard de Vuelos Espaciales.
Vulnerabilidad satelital
A partir de 2020, los científicos detectaron que la anomalía comenzó a dividirse en dos núcleos diferenciados, lo que representa una evolución más compleja e inestable. Los satélites Swarm (ESA) e ICON (NASA) monitorean de forma constante este fenómeno.
Además, los satélites que cruzan esta zona —incluida la Estación Espacial Internacional— deben apagar ciertos instrumentos sensibles para evitar daños electrónicos por la radiación intensa.
Impacto en el centro norte arrgentino
El impacto ya se deja sentir en provincias como Córdoba, Santa Fe, Santiago del Estero y Tucumán, donde se han reportado interferencias esporádicas en sistemas GPS y en telecomunicaciones de alta frecuencia.
Desde la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) advirtieron que, aunque no representa un riesgo directo para la vida humana, la situación “debe ser observada con seriedad porque refleja procesos dinámicos profundos del planeta”.
Origen de la anomalía?
El fenómeno se relaciona con irregularidades en el núcleo externo de la Tierra, compuesto por hierro líquido. Este movimiento genera el campo magnético global, pero en ciertas regiones —como en el Atlántico Sur— surgen zonas con menor intensidad, debilitando el escudo protector natural de la Tierra frente a la radiación solar.
Estudios recientes sugieren que también influye una gran estructura geológica bajo África, denominada “African Large Low-Shear Velocity Province”, que podría estar modificando la dinámica del núcleo.
Fenómeno irreversible
Hasta el momento, no hay forma de revertir la expansión de la AMAS, aunque la comunidad científica trabaja en el desarrollo de tecnologías adaptativas. La NASA y la Universidad de Maryland utilizan modelos avanzados como el GEMS (Geomagnetic Ensemble Modeling System) para anticipar la evolución del campo magnético.
Estos estudios no solo buscan proteger los sistemas actuales, sino también comprender fenómenos más amplios como la inversión de los polos magnéticos o la variación secular del campo.
En un contexto de creciente dependencia tecnológica, la expansión de la AMAS representa un desafío global, pero con implicancias concretas y locales para la Argentina, donde se hace cada vez más urgente reforzar la infraestructura de comunicaciones y monitoreo satelital. (InfoGEI)Ac