Distintos sindicatos vinculados a la industria y el transporte están promoviendo un proceso de renovación profunda en la Confederación General del Trabajo (CGT). Con una estrategia que busca consolidar un perfil más combativo, ya piensan en disputar la conducción de la central obrera, y advierten sobre una disputa directa con el poder empresarial, particularmente con el grupo Techint, al que acusan de intentar controlar la Secretaría de Trabajo y, eventualmente, la CGT.
La Plata, 17 Jul (Por InfoGEI).-El espacio en construcción está conformado por gremios que pretenden romper con el actual modelo de conducción tripartita y volver a una estructura unificada, con un único secretario general.
Según el sitio especializado Infogremiales, uno de los nombres que empieza a tomar protagonismo como posible figura de liderazgo es el del titular de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), Abel Furlán, quien representa a uno de los sindicatos más tradicionales y de mayor peso dentro de la CGT.
Desde esta línea sindical señalan que el actual esquema de negociación con el gobierno de Javier Milei ha fracasado y que es necesario adoptar una postura de mayor confrontación frente a las políticas de ajuste, desregulación y recorte de derechos laborales. “La Secretaría de Trabajo está ocupada por Techint, y su objetivo es tomar el control de la CGT”, denunció uno de los referentes del espacio, en alusión al rol del secretario de Trabajo, Julio Cordero, vinculado al holding de Paolo Rocca.
Además del cuestionamiento a la inacción de la actual conducción, los impulsores del reagrupamiento aseguran que es necesario canalizar el malestar que se acumula en las bases sindicales ante la pérdida de poder adquisitivo, la parálisis de las paritarias y la falta de respuesta ante situaciones críticas como la detención de Cristina Fernández de Kirchner.
Convocatoria amplia
La estrategia consiste en convocar a todos los sectores afectados por las políticas gubernamentales —desde sindicatos pequeños hasta grandes gremios de la industria, transporte, salud y ciencia— para construir una nueva mayoría sindical. Incluso se plantean sumar a espacios de perfil más combativo, como el gremio del Neumático, que actualmente está en manos de una conducción de izquierda.
Masa crítica
El objetivo inmediato es reunir una base de al menos 150 gremios, cifra con la cual podrían presionar a los sectores denominados “los gordos” e “independientes” para alinearse o quedar al margen del nuevo armado. En caso contrario, no descartan avanzar hacia una fractura formal de la central obrera.
La referencia de Furlan
En ese marco, la figura de Furlán aparece como una posible referencia de unidad y conducción firme, aunque él mismo insiste en priorizar el proyecto colectivo por encima de los nombres. No obstante, sus últimas declaraciones públicas, particularmente durante un encuentro del Frente de Lucha por la Soberanía, el Trabajo Digno y los Salarios Justos, reflejaron tensiones internas y encendieron las alarmas entre sus pares al señalar que Techint no solo quiere debilitar a su sindicato, sino también desarticular los mecanismos de defensa de los trabajadores en su conjunto.
Agenda industriaalista
Desde este sector sindical plantean que la CGT debe volver a defender una agenda ligada al peronismo industrial, con un plan de desarrollo y justicia social, similar al planteado históricamente en Huerta Grande, y destacan al gobernador Axel Kicillof como uno de los exponentes políticos de esa visión.
Hacia el Congreso de la CGT
El camino hacia la renovación de la CGT, cuyo congreso electivo se espera para noviembre, ya está en marcha. Y si bien aún se encuentra en etapa de consolidación, este nuevo bloque gremial apuesta a romper con la inercia, dar una pelea de fondo y recuperar una central sindical alineada con los intereses de los trabajadores frente a un contexto que prevén cada vez más hostil. (InfoGEI)Jd