Sendas comunicaciones firmadas por el presidente y el gerente general administrativo de SOFSE, una semana antes del choque de trenes en Palermo, reclamaban al Gobierno Nacional, que retome el financiamiento para gastos operativos e insumos básicos, a fin de resguardar “estándares mínimos de seguridad”. Además, señalaban que “peligra el mantenimiento de vías y coches, el suministro de gasóil y electricidad, y hasta los controles de alcoholemia a conductores”.
La Plata, 13 May (Por InfoGEI).-En un documento obtenido por el sitio web especializado en temas ferroviarios, “EnElSubte”, fechado el viernes 3 de mayo, apenas una semana antes del trágico choque entre dos trenes en la línea San Martín, revela que el presidente de Trenes Argentinos Operaciones (SOFSE), Luis Adrián Luque, alertó a sus superiores sobre la crítica situación de la empresa y la necesidad urgente de obtener fondos adicionales para garantizar el funcionamiento adecuado de los servicios ferroviarios y mantener los estándares mínimos de seguridad operativa.
En la nota dirigida al presidente de Ferrocarriles Argentinos (FASE), Patricio Gilligan, con copia al secretario de Transporte, Franco Mogetta, y al funcionario de la Jefatura de Gabinete, Mauricio González Botto, Luque resaltó la “urgencia” de gestionar la asignación de fondos necesarios. Se enfatizó que los gastos corrientes son vitales para el funcionamiento diario, mientras que los gastos de capital son cruciales para contrataciones de obras y mantenimiento de formaciones.
Luque solicitó un aumento presupuestario de $32 mil millones para mayo, representando un 68% más que los fondos asignados hasta el momento. Según un informe adjunto elaborado por el gerente general administrativo, Jorge Álvarez Holmberg, el ajuste realizado por el Gobierno en el primer trimestre de 2024 redujo drásticamente los fondos disponibles para cubrir los gastos operativos.
Informe interno
El informe interno elaborado por Álvarez Holmberg detalla las consecuencias del ahogo presupuestario en SOFSE, incluyendo la parálisis del mantenimiento regular, la interrupción de licitaciones para adquisición de material rodante, problemas para acceder a combustible y pago de servicios básicos, entre otros. También revela una deuda acumulada con proveedores de aproximadamente $80 mil millones.
Además, se mencionan los recortes ejecutados en Trenes Argentinos Infraestructura (ADIF), lo que ha llevado a la suspensión de obras esenciales de infraestructura, como la renovación de vías y señalamiento en la línea San Martín. Esto, junto con otros ajustes, ha impactado en la calidad del servicio ferroviario y plantea riesgos operativos y de seguridad.
Estos documentos arrojan luz sobre las consecuencias del ajuste fiscal en curso para la seguridad de trabajadores y usuarios del sistema ferroviario. La tragedia de Once hace doce años sirve como recordatorio de los peligros que surgen cuando el Estado abdica de sus responsabilidades en la gestión de servicios esenciales. (InfoGEI)Ac